super MAMÁS

Con el cambio de tiempo y la bajada de temperaturas, en casa ya han aparecido los mocos, tos y fiebre, con lo que conlleva toda una organización familiar de abuelos y cuidadoras al no poder acudir al cole o guardería.

Para ellos es el momento de jugar con el agua y para nosotros el momento de parar de toda la actividad del día para dedicarlo a nuestros hijos. No es lo mismo bañar a un recién nacido que a un niño de dos o tres años, pero en todos los casos es un momento para disfrutar.

Si estás embarazada, en los controles analíticos trimestrales uno de los parámetros a controlar será la glucosa, porque durante el embarazo puede aparecer una diabetes gestacional cuando los cambios hormonales del embarazo interactúan con la capacidad del organismo de utilizar su propia insulina.

En el blog de SuperMamás nos preocupa el cuidado de la piel de nuestros hijos!

Que los niños no tengan apetito es algo que ocurre y generalmente es un hecho inofensivo. Pero, ¿qué padres no han estado preocupados porque su hijo no come como a ellos les gustaría?

En los últimos meses la muerte de dos niños por difteria y tosferina nos ha demostrado la importancia que tiene la vacunación de nuestros hijos y que no podemos bajar la guardia aunque sean enfermedades casi bien erradicadas en España.

Llega la hora de acostarse y es fundamental que tu hijo esté relajado para que pueda conciliar el sueño. Es muy importante seguir una rutina diaria de la hora del baño, la cena y el momento de ir a la cama. Si no mantenemos un orden horario es muy complicado que nuestro hijo esté predispuesto a acostarse porque siempre habrá algún juguete que le pueda entretener.

El chupete puede convertirse en nuestro aliado en momentos de inquietud, hambre o sueño de nuestro hijo. El efecto de la succión permite liberar endorfinas que le tranquilizan y nos facilitan la relajación de nuestro bebé.

Si tu hijo está tomando pecho raramente presentará cuadros de estreñimiento, ya que la leche materna es de fácil digestión, contribuye a la maduración gastrointestinal y favorece el crecimiento de bifidobacterias que regulan el tránsito intestinal. En cambio, los niños alimentados con biberón pueden presentar episodios de estreñimiento con más frecuencia debido a una mayor dificultad para digerir la leche adaptada.

Hay pediatras que directamente te prescriben la leche que debe tomar tu hijo, pero otros, como es el de mis hijos, te dejan elegir a tu criterio. Pero, ¿cómo elegir la correcta? ¿Por marca, por precio, por lo que te aconsejan en la farmacia, por experiencias anteriores…?