Las sales de Schüssler durante el embarazo

Aunque no todas las mujeres somos iguales, existen trastornos típicos que se dan durante el embarazo que pueden llegar a ser muy molestos. A ver si te suenan y te explicamos a que son debidos:

Náuseas y/o vómitos: las náuseas pueden estar asociadas por una reacción a la gonadotropina (HCG), una hormona esencial para la supervivencia del óvulo.
Las náuseas pueden acompañarse de espasmos digestivos produciendo el vómito.

Estreñimiento: una de sus causas es el aumento de la hormona progesterona que ralentiza el movimiento de los intestinos. Otra causa es la presión que el útero ejerce sobre el intestino.

Hiperacidez: suele venir provocado por la presión sobre la boca del estómago que hace que no se cierre del todo la válvula que contiene los ácidos estomacales.

Anemia: el organismo de la mujer está creando vida, y utiliza sus recursos para esa nueva personita que crece en su interior, esto puede hacer que la mamá tenga carencia de algunos minerales básicos que son necesarios para el buen funcionamiento de su cuerpo como hierro y calcio entre otros.

Calambres y piernas cansadas: sobre todo en el último trimestre del embarazo, debido al incremento de peso y a la retención de líquidos.

Hemorroides: son venas que se inflaman y en ocasiones salen hacia fuera. Hay mujeres más propensas que otras a sufrirlas y el estreñimiento puede hacerlas aparecer. La hormona progesterona es la encargada de hacer que las paredes venosas se vuelvan más elásticas.

Cloasma: son manchas en la piel que aparecen durante el embarazo y en la mayoría de los casos suelen desaparecer por si solas después. Es recomendable no exponerse al sol durante la presencia de estas manchas.

Varices: igual que en los edemas el retorno venoso se hace más difícil y puede ocasionar varices.

Estrías: son roturas internas de la piel que se producen por el estiramiento de ésta en los senos, vientre, piernas y glúteos. Es mejor tratarlas desde antes de su aparición, hidratando bien la piel para que esté elástica y evitar que se rompa.

Edema: sucede cuando se acumula líquido en los pies y tobillos, es debido a la presión que ejerce el útero sobre la vena cava que transporta la sangre desde las extremidades hasta el corazón. Como consejo recomendamos poner las piernas en alto cada vez que sea posible, no utilizar zapatos ni ropa apretada y beber suficiente agua.

Durante este periodo no es aconsejable tomar según qué medicamentos y debes seguir las pautas de tu ginecólogo. Como terapia alternativa tu ginecólogo te puede recomendar las sales de Schüssler, que te ayudaran durante este periodo a encontrarte mejor y a superar las pequeñas molestias pasajeras que quedarán en el olvido una vez veas la cara de tu bebé.

Te facilitamos una tabla guía con las sales más importantes para cada síntoma: 

Excepto que tu médico te indique lo contrario, como pauta general las sales de Schüssler se toman disueltas en la boca, 2 comprimidos de cada sal 3 veces al día, siempre mejor fuera de las comidas.

Fuente: Asociación Española de Bioquímica Schüssler